Prácticas en una startup extranjera

Dejar un lugar después de casi un mes es difícil. Es un hecho que vivir en un lugar durante varias semanas (en mi caso haciendo prácticas en una startup extranjera) hace que te hagas a la rutina y empieces a llamar a los camareros por su nombre – ¡y ellos a ti! Hay un dicho que me encanta y que dice así: “El hogar es dónde se halla el corazón”, y yo he dejado una parte del mío en Poros, en la verde colina en la que se sitúa Live-Bio.

La experiencia: prácticas en una startup extranjera

Trabajar en Live-Bio ha sido toda una nueva experiencia. Me decidí por estas prácticas deseando conocer a los dos empresarios que habían decidido dejar su trabajo en grandes compañías y empezar un nuevo y renovado estilo de vida (que decidieron llamar Live-Bio). En mi camino por descubrir el verdadero significado de este término, he acabado adorando a la gente, el lugar y el paisaje.

A la hora de trabajar, considero que es importante tener mi propio espacio, además de tranquilidad. En Live-Bio, conseguí esto y mucho más. Acabé levantándome todas las mañanas a unas vitas increíbles de la isla de Poros y del Mar Egeo. Volví a montar en una bicicleta después de 10 años, y lo cierto es que no se me dio mal. Bebí café, mucho y delicioso café (tenéis que probar la maravillosa invención griega que es el Frappé). Comí, comí y comí (me encanta mi relación con el turismo gastronómico). Visité otras islas y probé vino en las mejores bodegas de Nemea (mi favorita fue Skouras). Vi a la encantadora Nauplia, la antigua capital griega. Me quedó pendiente visitar el Teatro de Epidauro y probar sus increíbles acústicas. ¡He de volver!

Descubriendo la isla Poros en bicicleta

Caminando por las preciosas calles de Nauplia

Visitando los vinedos de Nemea y probando vino

Souvlaki, comida esencial en Grecia!

El pais: Grecia

Gracias a esta experiencia he descubierto que Grecia no es solo la Acrópolis de Atenas y los pequeños pueblecitos costeros con casas blancas. Grecia también es montañosa, con montones de oliveros decorando el Peloponeso y pequeñas ciudades en la que los coches no pueden entrar. En Live-Bio se ofrecen una gran cantidad de actividades por la isla y la península, ¡así que no te olvides de preguntarles!

Visitar Grecia no estaba entre mis prioridades este año, pero la verdad es que me alegro profundamente de haber podido ir, y espero volver.. Me he enamorado del Mar Egeo. Cuando estudié en tercero de la ESO los mares de Europa, nadie me dijo que el Mar Egeo era tan azul como una amatista y que el agua estaba tan limpia que podías ver el fondo estuvieras donde estuvieses. Las playas de este país son increíbles (suertuda de mí el tener tantas cerca de mi apartamento); vuelvo morena a casa, y mi madre no va a dar crédito.

El lugar: Live-Bio

Magdalena y Periklis, los organizadores de las prácticas en una startup que es Live-Bio, han sido unos anfitriones ejemplares. El hecho de que hablaran español me ayudó mucho al inicio de mi estancia: no porque no pudiera hablar inglés, sino porque salir de tu país es siempre duro y que alguien hable tu lengua materna te ayuda a sentir una cierta cercanía. Live-Bio ha construido su propia comunidad: un grupo de gente a los que estarán encantados de llevarte a conocer y que realmente te harán sentir muy especial. Puede incluso aprovechar para practicar su inglés, o casi cualquier otra lengua (me ha sorprendido la cantidad de gente de todas partes en este país), además de aprender lo propio en griego.

Que esperar?

Para aquellos que tienen miedo de visitar este país, por el motivo que sea, efusivamente os incito a que no dejéis de hacerlo. Es seguro y muy agradable. La gente lleva la hospitalidad en la sangre y llegar a los sitios no es difícil (además, la conectividad desde Poros es muy buena, pudiendo ir a Atenas en una hora o a la orilla de enfrente en 5 minutos).

Nos vemos pronto!